lunes, 11 de abril de 2011

¿Curación o eugenesia? Las mentiras de la ciencia

Los titulares no dejaban lugar a dudas: la ciencia había "librado" a un bebé barcelonés de un gen que le predisponía a padecer un cáncer de mama de un tipo muy agresivo. Todos los medios de comunicación, hasta los más "católicos", cayeron en la trampa de repetir los mismos titulares fabricados por la clínica en la que nació el bebé y redistribuidos por las agencias.


Titulares que tratan de esconder, bajo el relumbrón de una experiencia pionera en España, con un resultado tan feliz como el nacimiento de un niño "sano", aspectos tan escabrosos como la eliminación de hasta 11 hermanos portadores o no de dicho gen.


No hace falta ser un experto para darse cuenta de la gran manipulación con la que ésta técnica médica ha sido presentada a la sociedad. Sólo hay que teclear en Google "bebé libre" para que aparezcan docenas de noticias relacionadas con el asunto. Pero, cuando uno bucea en la noticia, la pregunta es: ¿de qué se ha liberado al bebé? ¿Se ha ejercido algún tipo de acción sobre ese embrión para que no heredase el gen "problemático"? ¿Significa que este niño nunca tendrá cáncer? ¿Se le ha curado de algo? Lo cierto es que no. De lo único que se ha librado a este niño es de haber sido eliminado como el resto de embriones hermanos a quienes no se ha dado la oportunidad de desarrollarse. Y es que la técnica que se ha aplicado para este "milagro" de la ciencia no ha sido más que la eufemísticamente conocida como "diagnóstico genético preimplantacional". Es decir, elegir antes de implantar en el útero de la madre los embriones considerados sanos, desechando el resto.


El tema es difícil de criticar si no es desde la firme resolución de que los embriones son seres humanos y, por lo tanto, tienen el mismo derecho a vivir que los seres humanos que ya son fetos, bebés, niños, jóvenes, adultos, mayores o ancianos. Porque, ¿en qué momento del desarrollo biológico de las personas podemos establecer el derecho a vivir? ¿Dónde está la dignidad humana? ¿En la edad, en el color de la piel? ¿En la mayor o menor probabilidad de desarrollar enfermedades?


Ningún padre quiere que un hijo suyo desarrolle un cáncer. Pero ningún padre permitiría tampoco que se eliminase a su hijo porque quizá desarrolle una enfermedad. ¿Se ha explicado esto a los padres? ¿Les ha informado el equipo médico de que gran parte de la comunidad científica considera éticamente inadmisible esta práctica? .


Muchos de nosotros y de nuestros familiares hemos tenido cáncer por una predisposición genética. ¿Mejor no haber nacido? ¿Esas vidas han sido inútiles?.


Por poner un ejemplo de la vida real: la artista Luz Casal, ha sido operada varias veces de cáncer de mama y hoy sigue actuando por todo el mundo. ¿A cuánta gente hace feliz cada día esta cantante? De haber tenido que elegir entre ella o un posible hermano que no desarrollaría el cáncer, ¿a quién habría elegido un equipo médico? ¿Qué nos habríamos perdido? ¿A qué ciencia estamos, entonces, aplaudiendo?.


Artículo de "Redacción" de la revista Diócesis de Málaga 06/04/2011.

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